El primer domingo de noviembre en Mendoza comenzó con un sobresalto para los habitantes de la provincia. A las 9.30 de la mañana, un intenso sismo estremeció la región, generando preocupación.

El temblor, con una magnitud de 4,2 grados en la escala de Richter, tuvo su epicentro en el Valle de Uco, ubicado a 70 kilómetros al sur de la capital provincial y a 35 kilómetros al este de Tunuyán. Según el Instituto Nacional de Prevención Sísmica (Inpres), la profundidad del sismo fue de 37 kilómetros.
El movimiento telúrico se hizo sentir en gran parte de la provincia, despertando a los mendocinos en una mañana movida. Las autoridades continúan monitoreando la situación para evaluar posibles daños o réplicas.