Un edificio ubicado en una zona antigua de Johannesburgo se ha convertido en el escenario de una tragedia que ha dejado un saldo trágico de al menos 73 personas fallecidas y decenas más heridas. El incendio, que ha conmocionado a la comunidad local, ha provocado una movilización masiva de los servicios de emergencia.

Las llamas arrasaron el edificio en las primeras horas de la mañana, desatando una respuesta urgente de los bomberos que recibieron la alerta alrededor de la 01:30 hora local. Su misión fue enfrentar el fuego y rescatar a las personas que se encontraban atrapadas en el interior del inmueble. A pesar de los esfuerzos desesperados, el incendio cobró la vida de al menos 73 personas y dejó a 52 heridos, quienes fueron rápidamente trasladados a centros médicos para recibir atención de emergencia.

La cifra actualizada de víctimas es de 73 fallecidos y 52 personas heridas que han sido trasladadas a distintos centros de salud para recibir atención adicional, informó Robert Mulaudzi, portavoz de los Servicios de Gestión de Emergencias. Mulaudzi expresó su asombro ante la magnitud de la tragedia, subrayando que en sus más de dos décadas de servicio nunca había enfrentado una situación similar.

Entre las víctimas se encontraba un niño de entre uno y dos años, un detalle que añade una dimensión aún más desgarradora a esta catástrofe. Los sobrevivientes, algunos con heridas leves y otros afectados por la inhalación de humo tóxico, fueron apresuradamente trasladados a centros hospitalarios cercanos para recibir tratamiento médico.