La presión en el Senado aumenta a medida que se intensifica el debate sobre el DNU impulsado por Javier Milei. La senadora Anabel Fernández Sagasti, junto al bloque de Unión por la Patria, ha instado a la vicepresidenta Victoria Villarruel a convocar una sesión para discutir este tema, enfatizando su importancia para la agenda legislativa. Sin embargo, el oficialismo muestra reticencia ante la posibilidad de enfrentar otra derrota, especialmente después del revés sufrido en la Cámara de Diputados.

El peronismo busca avanzar con la discusión del DNU en el Senado como una estrategia para contrarrestar su falta de mayoría en esta cámara. Por su parte, desde La Libertad Avanza prefieren evitar riesgos y no arriesgarse a un posible rechazo del DNU en ambas cámaras, lo que podría significar un duro golpe para el gobierno.

El kirchnerismo ha renovado su pedido para tratar el DNU de Milei, argumentando la necesidad de abordar esta cuestión de manera urgente. Sin embargo, la vicepresidenta Villarruel ha mostrado firmeza en su postura de no convocar a la sesión, lo que complica los planes del peronismo.

La tensión política en el Senado se refleja en el cruce de declaraciones y acciones entre las distintas fuerzas políticas. Mientras tanto, el resto de los bloques se mantienen en conversaciones con el oficialismo, buscando alternativas para avanzar en la agenda legislativa sin generar mayores conflictos.

En medio de esta disputa, queda en evidencia la importancia y el impacto que tiene el debate sobre el DNU en el escenario político nacional, marcando un momento clave en la relación entre el gobierno y la oposición en el Senado.