En un contexto de preocupación por la desaceleración de sus exportaciones, la provincia de Mendoza ha visto una disminución del 31% en sus ingresos por exportación en los últimos diez años, según datos revelados por el Consejo Empresario Mendocino (CEM). Si bien el panorama parece desafiante, también se vislumbra un horizonte de esperanza.
Estancamiento exportador: una década de números en retroceso
Las exportaciones de bienes de Mendoza alcanzaron los U$S 1.601 millones en 2022, lo que representa un descenso del 1% en comparación con el año anterior. Esta cifra refleja un declive continuo en las exportaciones de la provincia, ya que en términos nominales, los ingresos son un 11.4% menores que en 2012 y un significativo 31% inferiores si se consideran en términos reales.
El primer semestre de 2023 no brindó buenas noticias, con caídas del 24% en las exportaciones argentinas y del 22% en las exportaciones mendocinas, agravando aún más la situación.
Según el informe del CEM, este estancamiento se ha convertido en una preocupación creciente. El presidente del CEM, el Ingeniero Eduardo Pulenta, la Licenciada Silvia Jardel (Gerenta General), y el Licenciado Gustavo Rivarola (Asesor Económico) advierten que “las exportaciones, uno de los motores para traccionar el crecimiento de la economía local, están aletargadas”.
Diversificación limitada y productos estrella
Un análisis de la estructura de las exportaciones de Mendoza revela que, entre 2012 y 2022, ha habido una relativa estabilidad. Los Productos Primarios y el rubro Combustibles y Energía representan el 11% y el 5%, respectivamente, mientras que las Manufacturas han mantenido una participación por encima del 80%.
El informe del CEM destaca: “Nuestras exportaciones se concentran en pocos productos y en pocos países-destino, aunque el grado de diversificación aumentó levemente el último año. Nuestro principal producto de exportación en 2022 fue, como es tradicional, el vino fraccionado, seguido por el polipropileno y el ajo”.
El 64% de las exportaciones mendocinas se originan en tan solo 5 productos, y el 50% se concentra en 3 productos de la industria vitivinícola. En la última década, la contracción en el volumen exportado ha sido del 12.8%, mientras que el precio promedio por kilo exportado ha aumentado un 1.6%.
El camino hacia la reactivación exportadora
El CEM identifica las claves para revertir esta situación de “aletargamiento”. Se destaca la necesidad de “generar condiciones que promuevan la productividad y la competitividad de la economía”. Esto implica la reducción de trámites burocráticos y el establecimiento de reglas claras.
El atraso cambiario, la escasez de acuerdos de libre comercio, los múltiples tipos de cambio y las dificultades para acceder a divisas e insumos importados se presentan como obstáculos significativos que deben superarse.
Nuevos horizontes para las exportaciones mendocinas
A pesar de los desafíos, Mendoza no se rinde y se aferra a la esperanza de un futuro más prometedor. Mario Lázzaro, titular de ProMendoza, destaca que, si bien las empresas han enfrentado un contexto adverso, han encontrado formas inteligentes de sostenerse en el exterior, tanto a nivel financiero como en el diseño de sus exportaciones y en la optimización de la cadena de suministros.
Lázzaro vislumbra un horizonte más alentador hacia 2025, donde se espera un aumento del 30% o más en las exportaciones de Mendoza. Este crecimiento se basaría en la reanudación de la explotación de Potasio Río Colorado, un nuevo recurso que podría agregar hasta 600 millones de dólares al monto final de las exportaciones.
Además, se proyecta la incorporación de otros sectores, como Hierro Indio y la minería no metalífera. Se espera que la metalmecánica crezca a medida que surjan obras a nivel mundial que requieran la exportación de productos específicos.
La diversificación de productos, como la cebolla dulce y el ajo industrializado, así como el aumento de servicios relacionados con la economía del conocimiento, también podrían impulsar el crecimiento de las exportaciones mendocinas.
Por último, se apunta a México y Brasil como destinos de exportación y posibles socios comerciales para la provincia, lo que podría abrir nuevas oportunidades de mercado.
