El DNU presentado por el presidente, compuesto por más de 360 artículos, presenta una marcada desregulación económica y propone un “plan de estabilización de shock”, derogando o modificando diversas leyes y normativas. En particular, el artículo 78 reemplaza al 177 de la Ley N° 20.744, focalizándose en ajustar las condiciones de la licencia para personas gestantes.

Según el nuevo artículo, se mantiene la prohibición de trabajar durante los 45 días previos al parto y hasta 45 días después del mismo. Sin embargo, se introduce una flexibilidad: las personas interesadas pueden reducir la licencia antes del parto a un mínimo de diez días, acumulando el resto en el período posterior de descanso.

Este cambio representa un ajuste respecto al artículo anterior, que permitía reducir el período previo al parto hasta un mínimo de 30 días. La medida busca adaptarse a las necesidades y preferencias de las personas gestantes, ofreciendo mayor flexibilidad en la organización de su tiempo antes y después del nacimiento, en consonancia con la visión de desregulación económica impulsada por el Gobierno de Milei.