China está dando pasos significativos en su exploración lunar con el plan de enviar múltiples robots a la Luna para buscar y analizar recursos, con un enfoque especial en el agua congelada. Expertos en el campo aseguran que el agua es un recurso crucial para el establecimiento de una presencia humana sostenible en la Luna, ya que permitiría la producción de oxígeno, hidrógeno y la posibilidad de cultivar plantas en su superficie.
Yang Mengfei, investigador principal de la Academia China de Tecnología Espacial, destaca la importancia del agua en el esfuerzo por colonizar la Luna a largo plazo. Explica que una vez identificados los lugares ricos en recursos, se podría iniciar un proceso de extracción y refinamiento de minerales metálicos y de silicio. Estos recursos serían utilizados para fabricar materiales de construcción, paneles solares y otros componentes necesarios para la infraestructura lunar.
El investigador también vislumbra un futuro en el que las bases lunares puedan servir como centros de investigación científica y operaciones robóticas, así como estaciones de repostaje para naves espaciales con destino a otros puntos del sistema solar.
Además del agua, China tiene un interés particular en el helio-3, un combustible potencial para futuras plantas de energía de fusión nuclear. Se estima que la Luna alberga cantidades significativas de este recurso, lo que lo convierte en un objetivo atractivo para futuras misiones de exploración.
Para respaldar esta ambiciosa iniciativa, científicos e ingenieros chinos están trabajando en el diseño de un sistema de comunicaciones y telecomando que facilite la interacción entre naves espaciales en la órbita terrestre y lunar. Este sistema será fundamental para la navegación y transmisión de datos entre la Tierra y la Luna.
En última instancia, Yang Mengfei imagina un futuro en el que los viajes interplanetarios sean accesibles para el público en general, convirtiendo a la Luna en el octavo continente de la humanidad y marcando un hito en la exploración espacial.
