Luis Caputo, el principal candidato a ministro de Economía del presidente electo Javier Milei, se reunió con CEOs y gerentes de bancos para abordar las inquietudes del sector financiero. Durante el encuentro, Caputo anunció que no se implementarán de inmediato las propuestas de dolarización de la economía ni el cierre del Banco Central, generando un alivio entre los banqueros del país.
El casi ministro subrayó la prioridad de un plan de estabilización económica basado en una hoja de ruta ortodoxa con un ancla fiscal y monetaria. Este plan incluiría un recorte del 2% del PBI. Aunque manifestó su relación conceptualmente positiva con la dolarización, enfatizó que esta sería considerada solo después de estabilizar la macroeconomía. Caputo descartó rotundamente la posibilidad de una dolarización inmediata, desvinculándose así de propuestas anteriores.
A diferencia de la postura de Milei, quien considera no negociable la dolarización y el cierre del Banco Central, Caputo se mostró dispuesto a debatir el tema una vez estabilizada la situación económica. Aunque el comunicado de la “Oficina del Presidente Electo” reafirmó que el cierre del Banco Central no es negociable, no se confirmaron detalles específicos.
Durante la reunión, Caputo, en un tono informal, evitó revelar detalles del plan económico y no confirmó designaciones, incluida la presidencia del Banco Central. La breve reunión, que duró menos de una hora, transmitió un mensaje de tranquilidad, descartando sorpresas o medidas drásticas.
En relación con las preocupaciones bancarias, Caputo aseguró que no habrá un plan bonex, reperfilamiento de deuda ni medidas drásticas. Descartó un levantamiento total del cepo el primer día de gobierno y afirmó que la demanda de dinero está demasiado baja. Considera que el shock necesario debe ser fiscal y monetario, dado que la emisión monetaria, el gasto y la política cambiaria están descontrolados.