Un hombre fue víctima de un violento asalto en su domicilio del barrio Justicia Social de Guaymallén. Actuaron dos encapuchados. Se llevaron otros elementos de valor.
Actuaron dos malvivientes armados. Para los detectives que trabajaron en la escena, sabían que la víctima tenía una importante cantidad de dinero en efectivo en uno de los sectores de la propiedad. Los asaltantes ingresaron a la casa ubicada en el barrio Justicia Social de Guaymallén y sorprendieron al morador, de 53 años: en cuestión de minutos, le dieron una paliza, le dispararon en la cabeza y le saquearon la casa. Antes de irse, se llevaron lo que habían ido a buscar: un millón y medio de pesos.
El hecho de inseguridad ocurrió durante la madrugada del sábado en un departamento interno ubicado en la manzana B del citado complejo guaymallino y no tuvo detenidos.
Una llamada al Centro Estratégico de Operaciones alertó a la policía sobre un asalto con un hombre herido de bala. Una movilidad con dos uniformados de la subcomisaría Conde, quienes se encontraban realizando tareas de patrullando en esa jurisdicción, fue desplazada hasta el complejo ubicado en Tirasso y Santo Tomás de Aquino para atender la novedad.
Al arribar entrevistaron al hombre asaltado, de nacionalidad boliviana, quien acababa de salvar su vida de milagro porque una bala le rozó la cabeza. “Presentaba una herida en el parietal izquierdo”, detallaron los policías que trabajaron en el teatro del hecho. La víctima también había sufrido un cachazo en la cabeza luego de forcejear con uno de los ladrones.
Detalló que se encontraba en la propiedad ubicada en el interior del domicilio, en una planta alta, cuando fue atacado por dos hombres encapuchados. Mediante amenazas de arma de fuego, le robaron todo lo tenían en frente: un aire acondicionado portátil, un teléfono celular J8 negro y un equipo de música.
Los delincuentes buscaban dinero en efectivo. Y en ese momento la víctima ofreció resistencia. Primero le pegaron en la cabeza con la empuñadora de un arma y luego le dispararon a corta distancia. El proyectil no dio en el rostro del hombre de milagro: rozó la parte izquierda de la cabeza. Así fue que tomaron los ahorros del morador, más de un millón y medio de pesos.
Con la víctima herida, se dieron a la fuga por los techos de otras propiedades hasta llegar a un descampado ubicado hacia el oeste de la vivienda. Allí los perdió de vista.
Los policías que llegaron hasta la casa dieron aviso al SEC y médicos realizaron las curaciones correspondientes. También llegó personal para asistir a la víctima y efectivos de la Unidad Investigativa departamental y Policía Científica para realizar iniciar los trabajos de recolección de pruebas para intentar encontrar a los autores del asalto.
Fuente: El Sol
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