En el último mes, el costo de la canasta básica alimentaria (CBA) experimentó un alza del 5,2%, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Esto trae preocupación para las familias, ya que un grupo compuesto por dos adultos y dos menores requirió ingresos superiores a los $104,227 para evitar caer en la indigencia.

La situación no mejora cuando se considera la canasta básica total (CBT), que incluye alimentos, indumentaria y transporte, y aumentó un 6,7% en junio. Para no caer por debajo de la línea de pobreza, el mismo grupo familiar tuvo que contar con ingresos de al menos $232,426.

Aunque el mes pasado mostró una desaceleración en la inflación, alcanzando un 6%, lo cual representa una baja respecto a los meses anteriores, los efectos en los precios de los alimentos siguen impactando a los hogares. El rubro de Alimentos y bebidas no alcohólicas subió un 4,1%, siendo el de menor variación dentro del Índice de Precios al Consumidor (IPC). Entre los productos que más aumentaron se destacan el azúcar con un 33,9%, la yerba mate con un 16,6%, el pan francés con un 13,1%, y otros.

El panorama en los primeros seis meses del año es preocupante: la Canasta Total acumuló un aumento del 52,4%, mientras que la Canasta Alimentaria subió un 55,1%. Esto contrasta con una inflación general del 50,7% en el mismo período, dejando a las familias en una difícil situación económica.

Mirando los últimos doce meses, el costo de la CBA avanzó un alarmante 124%, y la CBT no se quedó atrás, con un aumento del 123%.