Luego de que Julieta como líder de la semana salvará a Camila y el público a Lucila, Walter había quedado en un mano a mano con Romina.
Alas 22:15 dio comienzo una de las galas de eliminación más esperadas de este Gran Hermano, porque los protagonistas de la noche eran Alfa, Lucila y Romina. Con los bandos cada vez más definidos, se trataba de una placa que enfrentaba a dos figuras muy populares, como son Romina y Alfa. “Las cosas se dieron así” aseguró Santiago del Moro al comienzo de una emisión que estuvo atravesada por muchísima tensión.
Los primeros dos informes que presentó el conductor, tuvieron que ver con las repercusiones en la estrategia de Julieta. Como líder de la semana, ella salvó a Camila y dejó configurada la placa final, convencida que Lucila y Romina iban a dejar afuera a Alfa. Y si bien Walter inicialmente festejó el que su amiga fuera salvada, poco a poco se dio cuenta de los motivos detrás de esa jugada, y del riesgo que podía suponerle. Por su parte, las otras participantes estaban muy atentas al comportamiento de Walter, y cómo en los últimos días él intentó acercarse a todos y evitar las discusiones. “Pero el público tiene memoria”, aseguraba Romina frente a eso.
Tras un apasionante cierre de los comicios, Del Moro reveló que Alfa resultó eliminado como consecuencia de la decisión del público. El participante recibió el 52,83% de los votos, mientras que Romina cosechó el 47,17%.
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