En la madrugada de este sábado una mujer se presentó en la Comisaría 41 de San Carlos para denunciar a su marido por violencia de género. El denunciado es un oficial de policía de la zona, que además, fue el primer caso de un efectivo contagiado de coronavirus. Los hechos ocurrieron en la vivienda familiar.
El 11 de julio se conoció el primer caso de un efectivo contagiado de coronavirus y por el cual algunos de sus compañeros debieron ser aislados en la provincia. Ya recuperado, Sergio Emanuel Guajardo, que presta servicios en la Policía Vial, quedó demorado este sábado por pegarle a su pareja y por juntarse con amigos en su casa de San Carlos, Valle de Uco. Está en pasiva y analizan su futuro en la fuerza. Además fue imputado por violar el artículo 205 de Código Penal. Según publica el diario Sitio Andino.
El auxiliar de 32 años quien presta servicios -hasta el momento- en la Policía Vial y que trabaja en Potrerillos, momento que dio positivo por Covid-19. Una vez que detectaron la enfermedad, estuvo internado en el Hospital Scaravelli y aislaron a nueve de sus compañeros.
Denunciado por violencia de género
El día marte; recibió el alta médica y dialogó con Sitio Andino sobre su situación y donación de plasma. Hasta ese momento todo normal pero el sábado por la madrugada volvió a ser noticia, en este caso, policial y no de salud.
Este efectivo, con domicilio en La Consulta, San Carlos, se reunió con un grupo de amigos en su casa. Estas actividades están prohibidas en todo el territorio; salvo que se junten en bares como una de las restricciones por la pandemia, se puede leer en la publicación del matutino de la Ciudad de Mendoza.
Su pareja se presentó cerca de la 1 en la Comisaría 41° de La Consulta y lo denunció por violencia de género. Según la presentación judicial, la joven les explicó a las autoridades lo que le había pasado cuando se encontraba en su vivienda junto con el policía.
Explicó que su pareja estaba tomando bebidas alcohólicas con sus amigos y en un momento la comenzó a insultar de manera agresiva mientras ella estaba en una habitación. Luego, el sujeto la quiso echar de la casa por lo que la víctima se negó a abandonarla.
La joven denunció que la situación se tornó más violenta cuando el sospechoso se enojó y comenzó a agredirla para luego agarrarla del cuello. Después la golpeó contra una pared y le dio golpes de puño en la cabeza.
A raíz del episodio, se tomaron las medidas correspondientes y demoraron al efectivo. Además le sacaron el arma reglamentaria y quedó en pasiva. Esta situación fue confirmada por Marcelo Puertas, de la Inspección General de Seguridad.
Además de ser imputado por lesiones leves en contexto de violencia de género; también lo iban a acusar por violar las restricciones de distanciamiento social y por reunirse en su casa con amigos.
Fuente: Sitio Andino
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