Después de algunos meses, la familia de la menor expresó la alegría que sienten ya que la menor volvió al aula de una escuela.
Quizá este caso sirva para pensar (y mejor actuar) sobre esta problemática a que puede afectar a cualquier infancia, y en la que el conjunto social no suele estar a la altura para intervenir.
En las últimas horas Juan Carlos, el papá de la pequeña de 8 años que sufrió Bullying -y que se la vio en video durante una crisis de angustia- pudo retomar las clases presenciales en un aula de una escuela que se ubica un poco más lejos de su casa, pero en donde se cree la menor estará contenida.
“Le doy gracias a Dios por que hoy ingresó mi hija a la escuela muy contenta. Que Dios siempre me la cuide porque la amo más que a mi vida. Tu mamá y tu papá siempre te va defender hija porque te amamos mucho con tus hermana y hermano. Gracias a toda la gente por su saludo. Ella está feliz”, expresó en las redes con fotos que la muestran ingresando al nuevo lugar.
La situación dela menor demoró meses en resolverse y su caso se conoció a nivel nacional ya que expresó el flagelo que menores pueden padecer ante los abusos escolares. Organizaciones del Estado, medios de comunicación, padres de personas en edad escolar, etc. son parte de la solución en tanto y en cuanto exista compromiso y se tome acción en el problema.
Los días previos el abogado Sebastián Garro, intervino por la familia ente el Gobierno escolar y la Municipalidad de Tupungato para intentar obtener respuestas algo más rápidas aunque sin desconocer los encuentros y el diálogo.
Pese al tiempo que las administraciones parecen determinar, la pequeña volvió a una escuela con la felicidad de ella y su familia. Ojalá su caso nos sirva para aprender, para estar atentos; que nos sirva para mejorar como personas.
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